lunes, 9 de agosto de 2010

La maquetea que maquetea todas las maquetas.


 8/9/10
Venía del medico y con un """gran""" acto de ruptura de rutina me senté en una vereda, estaba muy entretenida observando los autos, la gente, cómo manejan, cómo caminan, qué hacen, a dónde van, si tienen reloj, si trabajan, si tienen hijos, si son amigos, si andan en bicicleta, si tienen el auto sucio, si vienen juntos, si están contentos o preocupados, si viven cerca, si vienen o si van, si tienen problemas, en qué piensan, en qué creen, qué compraron en las bolsas que cargan, qué música escuchan, si dicen estupideces, si miran la tele, por qué cruzan por la mitad de la calle, por qué ponen esa cara de concentración mientras caminan, y un albañil que trabajaba ahí cerca me gritó "estás estudiando en voz alta? o con quién estás hablando?". Ahí me di cuenta que estaba hablando en voz alta. Mi hermana me escucha hablar todo el tiempo. Si en voz alta es insoportable, en mi cabeza es peor. Sí, es mucho peor.

Hay tres clases de argumentos: el tuyo, el mío y el correcto.